La campaña de la Uva de Mesa Embolsada del Vinalopó, que se encuentra en la recta final del proceso de embolsado y cuyas variedades más tempranas han comenzado a recolectarse, se presenta con una bajada histórica de producción para la variedad Aledo, con una merma del 50% de la actual cosecha tras los dos episodios de pedrisco de la pasada primavera, el abandono de cultivos y las más de 300 hectáreas de parras que se han arrancado este año por la falta de rentabilidad.
Los agricultores han anunciado una disminución histórica de la variedad Aledo, la variedad más tardía, consumida en Nochevieja, de la que se estiman se han perdido 7 millones de kilos por los fuertes episodios de pedrisco producidos en mayo y junio, los abandonos del cultivo y los arranques de parra, llevados a cabo este último año por los agricultores, por la falta de rentabilidad.
Asaja Alicante ha asegurado que en las variedades tempranas, como la Victoria o Red Globe, el descenso de producción será menos acusado, de alrededor de un 25%, con lo que se espera recolectar junto a variedades como la Ideal, Dominga o Doña María alrededor de 15 millones de kilos. De este modo, de los 40 millones de kilos que se estimaban recoger este año únicamente se podrán cosechar alrededor de 28 millones de kilos de todas las variedades.
Pedro Rubira, presidente de ASAJA Novelda y representante sectorial de Uva de Mesa de Asaja Alicante, ha indicado que “esta reducción en la cosecha, que se traducirá en una calidad del fruto excepcional, también lleva aparejado un descenso de puestos de trabajo en el proceso de embolsado, con una reducción de más de la mitad de puestos, de 11.000 a 5.000 operarios”.
Incremento de costes de producción y rebaja del IRPF
Rubira ha denunciado que un año más la campaña de la uva de mesa del Vinalopó está marcada por un incremento de los costes de producción para el agricultor, con “aumentos del 75%, mientras se mantiene el producto en los precios de hace 20 años” y ha asegurado que desde ASAJA se seguirá luchando por una “rebaja permanente del IRPF para que se establezca un índice acorde, por debajo del 0’22, para todos los pueblos del Medio Vinalopó y se entienda, de este modo, la excepcionalidad de un cultivo artesanal y con gran necesidad de mano de obra”.