La Casa Bonmatí, el edificio histórico de propiedad privada y estilo ecléctico modernista que ocupa un lugar privilegiado en la Plaça Vella, podrá destinarse a actividades diversas una vez el Ayuntamiento ha aprobado inicialmente el cambio de uso que tenía asignado el inmueble en las normas urbanísticas, que pasa de sanitario-asistencial a equipamiento polivalente, lo que abre el abanico de posibilidades de la finca que, de esta forma, podría albergar actividades del sector terciario y de servicios, desde hostelería a comercio, pasando por las culturales y asociativas.
El pleno del Ayuntamiento de Novelda ha aprobado una modificación puntual de las normas subsidiarias que permitirá el cambio de uso de la conocida como Casa Bonmatí, un inmueble histórico de propiedad privada que se levanta sobre una parcela de suelo dotacional en la Plaça Vella y que hasta ahora estaba reservado a sanitario-asistencial, lo que limitaba el desarrollo de cualquier otro tipo de actividad en el edificio que, según los informes técnicos, presenta importantes deficiencias estructurales, de humedades, accesibilidad y cubiertas, que necesitan de una importante inversión para su recuperación.
Isabel Miralles, concejala de Urbanismo, ha señalado que el objetivo de esta modificación inicial, que se convertirá en definitiva cuando concluya el plazo de exposición pública, es el de “intentar dar mayor vida y favorecer la conservación del patrimonio, especialmente de este tipo de inmuebles que, a pesar de estar protegidos, no tienen garantía de poder mantenerse en el tiempo”.
La Casa Bonmatí, un edificio de construido en 1926 que albergó la sede local de Cruz Roja desde la década de 1970 hasta 2008 y está incluido en el catálogo de bienes histórico artísticos del municipio, se levanta sobre una parcela de uso dotacional lo que, de no efectuarse la modificación, limitaba el desarrollo de actividades a las relacionadas en este caso concreto con las sanitarias y asistenciales.
La titular de Urbanismo ha calificado la modificación como una “gran oportunidad para que estos inmuebles de titularidad privada, que tienen un importante valor arquitectónico, histórico y cultural, puedan adaptarse a las necesidades que demanda la ciudadanía y, al mismo tiempo, sirvan para revitalizar el casco antiguo del municipio”.